Disfruta en bicicleta de fascinantes paisajes y ciudades alemanas. Estas rutas ciclistas son extensas y bien organizadas. Toda una inspiración para los sentidos. Y es que en bicicleta puedes explorar Alemania de forma económica y ecológica.
Mar Báltico
Aquí puedes pedalear con vistas al mar. Los 800 km de la ruta del mar Báltico van desde Flensburg, a lo largo de la costa del mar Báltico, hasta Ahlbeck, en la isla de Usedom. La ruta cuenta con playas de arena, paisajes muy variados, balnearios y pueblos pesqueros muy pintorescos. El camino transcurre en su mayor parte en llano y resulta ideal para familias con niños.
Main Radweg
Esta ruta transcurre por el río Meno desde su nacimiento hasta su desembocadura y recorre en sus casi 600 km el Fichtelgebirge, la Suiza Francona, la Selva de Franconia y la ciudad de Frankfurt. En el camino entre Bamberg, Würzburg y Mainz te esperan hermosos lugares de interés y especialidades gastronómicas regionales.
Por el Elba
Esta ruta es muy conocida entre familias con niños. Arranca en la ciudad checa de Špindlerův Mlýn y tiene una longitud de unos 1.200 km. De ellos 840 km conducen a través de Alemania hasta Cuxhaven, donde el río Elba desemboca en el mar del Norte. Esta ruta está en su mayor parte asfaltada, es llana y casi siempre libre de vehículos. Durante su recorrido existen lugares de interés como por ejemplo, la catedral románica de Havelberg, la ruta del vino de Sajonia y la conocida Filarmónica del Elba en Hamburgo.
Lago de Constanza
También puedes recorrer en bicicleta los Alpes desde el lago más grande de Alemania, el lago de Constanza, hasta el lago de montaña más bello del país, el lago Königssee. Durante la ruta hay que hacer frente a algunos ascensos un tanto exigentes, pero el esfuerzo bien merece la pena. Tendrás unas vistas impresionantes, el famoso castillo de Neuschwanstein y los pueblos de montaña de Baviera son los puntos culminantes de esta excursión.
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