La policía alemana ha informado del ataque con piedras y petardos de un grupo de unas 30 personas contra un autobús lleno de refugiados en Jahndorf, cuando trataban de acceder a un centro de acogida.

Como consecuencia del ataque, el conductor ha resultado herido en un pie por un petardo, así como un vigilante de las instalaciones, y se ha roto una luna del vehículo.

La portavoz de la policía de Leipzig Kathleen Doetsch ha indicado que varios de los agresores han sido identificados y se investiga un posible delito de alteración del orden público.

El departamento de Investigación de lo Criminal de la Policía Federal (BKA) ha anunciado esta semana que, hasta primeros de diciembre, se han registrado en Alemania 817 ataques contra centros de acogida.

Alemania ha registrado ya la entrada de un millón de solicitantes de asilo este año, una cifra récord en su historia y cuatro veces mayor que la de 2014.